La importancia de caminar en linea recta
No se quien propone tomar la ultima copa por ahí pero acepto.
Acabo tomándome no una sino varias y la última parece no llegar nunca. Sólo ha pasado una hora y media y la situación a cambiado, tengo todos los síntomas de estar sobria, todo me parece gracioso y la tarea de caminar en linea recta se me hace complicado.
Me pierdo entre la multitud y hablo con todo el mundo, hablando con un chico se me cae el chicle de la boca y se pega en su zapato, ni se ha dado cuenta, las babas de mi chicle deben de ser realmente buenas, debería patentarlas como pegamento o silicona, o incluso como un sustitutivo del hormigon porque al cabo de media hora vuelvo a ver al mismo chico y sigue teniendo el chicle ahí pegado, de un blanco reluciente en el zapato negro.
Una mano amiga me rescata de un nido de buitres que me rodean, estan al acecho, deben creer que porque estoy borracha soy presa fácil, no saben cuanto se equivocan... borracha soy de lo peorcito.
La mano amiga es de Dani, me dice que nos vamos a casa,que estoy demasiado borracha, que ya recogeré mi coche mañana.Le digo que: iO no stoy vorracha, no se que me pasa en la lengua pero parece que tengo una zapatilla del 42 en la boca, empiezo a marearme, necesito aire y galletas para que me baje el alcohol.
Dani me compra galletas, me las como todas, de dos en dos, la prueba esta en mi nariz, en el cambio de marchas, en el salpicadero, no hay duda son de chocolate.
Una vez en la puerta de mi casa Dani intenta buscar las llaves, vacia mi desordenado bolso del cual saca: un tampax con el envoltorio casi roto, siete mecheros, el monedero, el movil, un cortaúñas ¿? dos pintalabios, colorete, 3 papeles arrugados con numeros de telefono y nombres de chicos que desconozco, al fin aparecen las llaves, me bajo del coche con una bota y un pie descalzo, no se que hecho con la otra. Cojo el ascensor por suerte hoy no esta estropeado, intento ponerme seria cuando veo a mi vecino que se va a trabajar, pero no puedo, justo al pasarlo de largo me descojono.
Mareada entro en casa y sin esperar ni un segundo tiro el bolso en el suelo y me acuesto en la cama. Dani viene detrás mio, susurra cosas como vaya tela, y se rie ¿ de mi? me pregunta como estoy, mi respuesta es un erupto, a continuación balbuceo un: estoy bien y vomito. No se porque pero ya no se rie.
Acabo tomándome no una sino varias y la última parece no llegar nunca. Sólo ha pasado una hora y media y la situación a cambiado, tengo todos los síntomas de estar sobria, todo me parece gracioso y la tarea de caminar en linea recta se me hace complicado.
Me pierdo entre la multitud y hablo con todo el mundo, hablando con un chico se me cae el chicle de la boca y se pega en su zapato, ni se ha dado cuenta, las babas de mi chicle deben de ser realmente buenas, debería patentarlas como pegamento o silicona, o incluso como un sustitutivo del hormigon porque al cabo de media hora vuelvo a ver al mismo chico y sigue teniendo el chicle ahí pegado, de un blanco reluciente en el zapato negro.
Una mano amiga me rescata de un nido de buitres que me rodean, estan al acecho, deben creer que porque estoy borracha soy presa fácil, no saben cuanto se equivocan... borracha soy de lo peorcito.
La mano amiga es de Dani, me dice que nos vamos a casa,que estoy demasiado borracha, que ya recogeré mi coche mañana.Le digo que: iO no stoy vorracha, no se que me pasa en la lengua pero parece que tengo una zapatilla del 42 en la boca, empiezo a marearme, necesito aire y galletas para que me baje el alcohol.
Dani me compra galletas, me las como todas, de dos en dos, la prueba esta en mi nariz, en el cambio de marchas, en el salpicadero, no hay duda son de chocolate.
Una vez en la puerta de mi casa Dani intenta buscar las llaves, vacia mi desordenado bolso del cual saca: un tampax con el envoltorio casi roto, siete mecheros, el monedero, el movil, un cortaúñas ¿? dos pintalabios, colorete, 3 papeles arrugados con numeros de telefono y nombres de chicos que desconozco, al fin aparecen las llaves, me bajo del coche con una bota y un pie descalzo, no se que hecho con la otra. Cojo el ascensor por suerte hoy no esta estropeado, intento ponerme seria cuando veo a mi vecino que se va a trabajar, pero no puedo, justo al pasarlo de largo me descojono.
Mareada entro en casa y sin esperar ni un segundo tiro el bolso en el suelo y me acuesto en la cama. Dani viene detrás mio, susurra cosas como vaya tela, y se rie ¿ de mi? me pregunta como estoy, mi respuesta es un erupto, a continuación balbuceo un: estoy bien y vomito. No se porque pero ya no se rie.
4 comentarios
Dani -
lokura -
Tautina -
Capitán taparrabos -
Sé que es arriesgado pedirlo, pero aquí en la isla hay mucho tiempo libre para pensar, así que el capi abre ligeramente la boca, se muerde la lengua, y después, poco a poco, hace esta ptición:
Anda, equilibrista, escribe a capi y le cuentas de qué estrella eres, si alguien pidió un deseo al verte pasar, si llevas tatuajes, si los astrónomos dicen que te han visto, el lugar en donde está tu cuerda de la que no te caes...
Besos del capi