La Taberna de Angel
Ángel se levanta cada día a las 6 y levanta la persiana a las 7, siempre en punto. Lleva siempre la misma camiseta roja de tirante fino, como si tuviera cientos de ellas todas del mismo color en el armario.
Enciende las luces y las neveras y también ajusta los casquillos de la cafetera.
Yo entro aún medio dormida, siempre a comprar tabaco, dame cambio y ángel me cambia la moneda de 2€ que nunca me coge la máquina por una sonrisa.
¿ que... a trabajar? Me pregunta..y se oye la máquina tragaperras que madrugadora ya ha dado su premio.
Somos pobres Angel... y abro el monedero y el me alcanza un número que hoy acaba en 4... que mira que si me toca no vengo mas tan temprano a comprarte tabaco, y el se ríe y se masajea la nuca con la palma de la mano. Pobres los del Sahara me dice siempre, y me cuenta una de sus batallas, siempre nueva de cuando estuvo de legionario en el desierto, levanta el dedo y señala una de las fotos de la pared.
Luego entra su mujer, que es algo retrasada y coge el cuchillo para cortar el jamón, ibérico, si miras hacia arriba no alcanzas a ver el techo, todo esta cubierto de ese olor a jabugo y a queso manchego.
Trae Rosa, a ver si te vas a cortar....y le retira el cuchillo de las manos, porque no preparas los boquerones, le dice con mimo... y yo me voy y los dejo ahí... como cada día en la taberna... que durante el día va llenándose de personajes pintorescos que se llenan la panza con el mejor queso en aceite y jamón del barrio, cortadito a lonchas finas por unas manos grandes.
Hasta luego Ángel, le digo casi en la puerta...hasta luego, contesta, siempre desde la cocina.
3 comentarios
uno_mas -
gracias por este rato de tranquilidad
saludos
daniella -
saludos
Vero -
cuando yo me topo con personas así me gusta indagar y conocer toda su historia :P ..
saluditos nena!!